[Personal] Motivación, motivación y más motivación.

Empieza Abril, así que, que mejor manera de empezar el mes en el blog que con una entrada.

Hoy voy a hablar de la motivación. Que creo que es lo que mueve el mundo y lo que puede convertir a un hombre en héroe.

La motivación fue lo que movió a Steven Rogers a insistir tanto, que acabó convirtiéndose en el 'Capitán América'. La motivación es lo que lleva a Andy Dufresne ('The Shawshank redemption', 1994) a insistir tanto para poder crear su biblioteca en la cárcel, y también para escapar de esta.

Parece obvio, que la motivación es importante. Pero estamos acostumbrados a hacer tantas cosas desmotivados o con motivaciones tan simples y banales, que llegan a servirnos solo en primera instancia para decidir si hacer o no algo. Luego seguiremos haciendo eso por inercia. Que finalmente, nos olvidamos de la motivación, nos olvidamos de nuestro objetivo inicial, no nos cuestionamos más las cosas y como de momento 'están bien', pues seguimos tal y como estamos. Olvidamos todas las cosas que nos pueden motivar a hacer algo, y nos quedamos con un solo y único motivo para hacer las cosas en esta vida, el dinero. Que es lo que nos da una seguridad de seguir viviendo igual, o un poco mejor, si se puede. ¿Por qué trabajas? Para así seguir teniendo dinero. ¿Por qué te casas? Porque me conviene fiscalmente, y por tanto de manera indirecta, económicamente. Olvidamos que en un principio entramos en aquel trabajo para lograr una base económica que nos permitiese abrir nuestro negocio, irnos a estudiar a donde fuere, o tener la experiencia para buscar el trabajo que de verdad queremos. Olvidamos que una vez amamos a la persona con la que nos estamos casando, ahora la vemos como la 'madre de mis hijos' (los tengas, o los vayas a tener) y la ventaja económica y fiscal de estar casados. Olvidamos que los amigos los dicta el corazón y no su profesión. Olvidamos todo esto, para seguir vivos.



Pero lo que en realidad importa, es que estemos motivados para hacer lo que queremos. Ya sea desde motivarnos para despertarnos más temprano, para seguir con la rutina de ejercicio aunque tengamos agujetas, para aguantar a ese jefe cabrón y amargado, para seguir con nuestra lucha sea cual sea, para hacer lo que sea. Porque como estamos motivados, sabemos que lograremos nuestro objetivo, sabemos que aunque tropecemos nos levantaremos, sabemos que lo único que nos impedirá ser lo que queremos, es la muerte.

La motivación, es lo que diferencia a Rafa Nadal de ese que dice 'yo era muy bueno en tenis, pero preferí meterme a mecánico que así me aseguraba el sueldo'. La motivación diferencia al hombre que se casa con una mujer a la que ama, de aquel que se casa con una mujer. La motivación es lo que diferencia a cualquier gran actor salido de la nada, de aquel que dijo 'nunca llegaré a nada' y acaba con cincuenta años, trabajando para un chico de treinta e ilusionándose con pequeños papeles en obras de teatro de barrio y cortos de escuelas, esperando con cincuenta, sesenta, o setenta años aun, ese golpe de suerte que le llevará a lo más alto. Es cierto, que podemos ser hijos de alguien, que nos toque la loteria, tener suerte con el examinador, que un golpe de suerte te lleve a la gloria. Pero creo que todos sabemos hijos de quien somos, y confiar nuestro futuro únicamente a la suerte, es como olvidarnos de ello.

Motivación, motivación y más motivación. Para lo grande y para lo pequeño. Si queremos correr la 'Cursa de Loquesea' pues nos entrenamos y nos apuntamos, no lo dejamos en un 'ya lo haré' o 'el año que viene hay otra'. Si vemos que podemos ganar ese concurso de televisión, llamamos y nos apuntamos, no perdemos nada por hacerlo. Si nos gusta esa chica, no perdemos el tiempo pensando en si sí o si no, nos acercamos y la conocemos. Si queremos ser el presidente de España, si queremos ser un gran directivo de empresa, si queremos ser profesor de historia, si queremos ser periodista de la CNN, si queremos bailar en el American Ballet, si queremos pilotar un avión de la más prestigiosa línea aérea que existe, si queremos ser el mejor director de cine de su época. Para todo esto, para que el tiempo no haga que quede en el olvido nuestro objetivo y pasemos a ser unos zombis que solo quieren seguir vivos, tenemos que estar motivados.

Se, que es obvio que hay objetivos que tienen límites de edad, lesiones que te obligan a olvidarte, limitaciones físicas o mentales que te impiden optar a ellos. Es en ese momento, ese en el que debemos pensar en lo que nos gusta y lo que queremos y elegir nuestro nuevo objetivo, esperando que este nunca vuelva a cambiar.

Andy Dufresne, justo después de escapar.

La motivación es lo que al final, en este mundo, justo antes de morir y ser todos iguales, decidirá quien de nosotros muere feliz por haber intentado hasta el fin del mundo lo que quería, y quien de nosotros muere, simplemente, muere.